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      La
      toxicidad sistémica de los anestésicos locales, potenciada por
      lidocaína y fenitoína iv 
      Artículo original: Simon L, Kariya N, Delle-Lancien E et al.
      Bupivacaine-Induced QRS Prolongation is Enhanced by Lidocaine and by
      Phenytoin in Rabbit Hearts. Anesth Analg 2002; 94: 203-207. 
      Introducción: Dentro de la toxicidad sistémica
      de los anestésicos locales destaca la toxicidad cardiovascular. Estos fármacos
      por sus efectos electrofisiológicos, bloqueo de los canales de Na, se
      encuadran en el grupo Ib de los antiarrítmicos. No hay suficiente
      información sobre la forma de actuación ante la aparición de esta
      toxicidad, especialmente ante el tratamiento de arritmias ventriculares.
      Hay autores que recomiendan el uso de lidocaina y/o fenitoína. 
      Resumen:
      Este trabajo es experimental. Se realiza sobre 24 ratas a las que infunden
      de forma continua bupivacaina a concentraciones suficientes para prolongar
      el QRS sin inducción de arritmias. Tras conseguir el objetivo, 8 son
      tratadas con salino, 8 con dosis progresivas de lidocaina y otras 8 con
      fenitoína. Los autores observan que las ratas tratadas con lidocaina o
      fenitoína presentan un aumento del alargamiento del QRS y se desencadenan
      arritmias ventriculares en el 25% y 50% respectivamente de las tratadas. 
      Comentario:
      Últimamente están saliendo a la luz pública fallecimientos de pacientes
      jóvenes en el seno de una cirugía local, probablemente alguno de ellos
      están desencadenados por toxicidad de los anestésicos locales. Esta
      toxicidad se puede deber a una administración IV inadvertida, a la
      inesperada  absorción sistémica
      del anestésico local o al uso de una dosis excesiva. Ante la situación
      de PCR (FV o TV) inducida por estos fármacos hay escasa información de cómo
      debemos actuar. Los autores demuestran que el uso de antiarrítmicos de su
      mismo grupo es incluso más perjudicial. Se echa de menos en el estudio el
      haber testado la amiodarona. Hasta de que dispongamos de más datos y, tal
      y como apuntan los autores, la única medidas de que disponemos es la
      realización de una RCP avanzada, sin empleo de antiarrítmicos, el
      suficiente tiempo para que la toxicidad miocárdica desaparezca. 
      Carlos Chamorro Jambrina 
      ©REMI, http://remi.uninet.edu.
      Septiembre 2002. 
      Enlaces: 
      
      Palabras clave: Bupivacaína,
      Lidocaína, Anestésicos locales, Fenitoína, Toxicidad, Tratamiento.
       
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